Entrevistamos a Daniela Rojas y Ufe Lobato, nuestras representantes en el proyecto de World Skills en la India

Lun 30 Nov 2015

Hemos tenido una amena charla con Daniela y Ufe, alumna y profesora de Ceinpro y nos han contado sus vivencias en la India con el proyecto de World Skills “Community Pumbing Challenge 2015”. Dicho proyecto consistía en diseñar e implementar una solución para que los niños tuvieran acceso a agua potable limpia y segura, así como en diseñar nuevos lavabos para que se puedan lavar las manos y crear una acometida nueva a la red de saneamiento en los urinarios.

Tras 2 semanas desde que volvisteis de la India habéis tenido tiempo de asimilar todo lo que vivisteis en ese viaje. ¿Con qué os quedáis de esa experiencia?

Ufe: Con los contrastes, los olores y colores, las sonrisas, son gente muy abierta y amable. La posibilidad de haber vivido desde dentro de un colegio el día a día de los niños, los profesores, ese contraste cultural ha sido algo increíble, una de esas experiencias vitales que se quedan en tu interior de por vida. Las niñas alucinaban con nosotras, nos perseguían constantemente para que las fotografiáramos y cuando les enseñábamos los videos que les grabábamos ya ni te cuento. Las aulas eran superbonitas, muy acogedoras con su decoración…

Daniela: me quedo de esta experiencia con lo mucho que se puede conseguir cuando más de una persona, centro o país colabora. Esto lo pude ver en la cantidad de trabajo que se realizó para la preparación del viaje, sólo fue posible realizarlo gracias a la ayuda de muchas personas que dieron su tiempo, habilidades y conocimientos para poder terminar la propuesta a tiempo. Una vez que estuvimos en India, cuando vimos la necesidad de los niños, hizo que todos quisiéramos terminar lo empezado. Conseguimos comunicarnos en diferentes idiomas, en un país muy distinto al nuestro con herramientas que nunca habríamos utilizado y personas con las que en circunstancias normales no nos relacionaríamos. Te das cuenta de que al final son las personas las que importan y tienen mucha valía.

¿Habéis notado grandes contrastes?

Ufe: En el colegio todos los alumnos iban con uniforme que es una forma de eliminar las diferencias, pero el contraste se veía en el calzado… algunos iban descalzos, también se notaba en los complementos…

Daniela: Honestamente sí. Creo que los contrastes culturales qué más puedo destacar son dos: Uno la manera en la que las personas trabajan, de cómo enfocan un problema y otro las costumbres, nosotros estamos acostumbrados a ciertos patrones de vida, mientras otros no los tienen o los ven de diferente manera.

¿Alguna anécdota curiosa que nos podáis contar?

Ufe: Al hablar con la gente aquí estamos acostumbrados a que quien escucha mueva la cabeza afirmativamente en señal de que te entiende o te atiende. Allí sin embargo ladean la cabeza a un lado y otro lo cual te despista.

Daniela: Creo que lo más curioso era la manera en la que los te contestaban a preguntas en las que normalmente nosotros responderíamos sí o no. Ellos lo que hacían era mover la cabeza y eso significaba que sí y que no. Así que nunca estabas seguro si era posible o si no realizar algo. Ahí te lo dejaban. Otra cosa curiosa que nos sucedió fue con un tipo de transporte de tres rudas que es como una moto, pero con techo y para más de 4 pasajeros y funcionan como taxis. Una noche para ir a cenar, los del equipo pedimos dos de estos transportes (Rickshaw). El conductor nos dice, “sí, aquí” y nos vamos a subir al que había señalado y al que estaba detrás. Antes de llegar al segundo nos empieza a decir, “no, no, en uno”. Nos quedamos con una cara de "aquí hay espacio para cinco personas cómodas más el conductor". Para no perder más tiempo y hacerle caso, nos subimos todos en uno. Terminamos viajando 7Km en las calles de Nashik, 11 personas (conductor inclusive).

¿Y del proyecto? ¿Qué nos podéis contar? ¿Ha salido todo como esperabais?

Ufe: No exactamente, al final se hizo un mix entre todas las propuestas presentadas. Nuestro planteamiento técnico, un sistema muy innovador para la potabilización del agua, no se tuvo en cuenta. Fue una pequeña decepción. Por otro lado, hemos logrado que los 500 niños del colegio tengan unas instalaciones sanitarias en condiciones. Nos quedamos con eso.

Daniela: Del proyecto lo que puedo decir es que creo por mucho que te prepares y leas y busques información sobre un lugar, en este caso Nashik. Nunca estás preparado para enfrentarte a lo que vas a hacer. Nuestro proyecto fue al final un conjunto de diseños que se decidió entre los profesores del colegio y los encargados del proyecto. Cuando por fin pudimos elaborar algo que pensamos que podía funcionar, hubo complicaciones. Los materiales no eran familiares, los diferentes acentos complicaban la comunicación entre nosotros, las diferentes maneras de trabajar ralentizaron el proceso... En fin, que lo que parecía un proyecto sencillo de realizar, se convirtió en un reto algo más complicado de lo esperado. Al final, el no querer dejar algo incompleto y habiendo visto la ilusión con la que esperaban la nueva instalación pudimos dejar: 25 grifos para que los niños se lavasen las manos a una altura que llegasen. Un sistema que reutilizaba el agua, y lo enviaba a los urinarios para mantenerlos más limpios. Honestamente nada salió como yo esperaba, y creo que por eso la experiencia fue tan enriquecedora y mucho más agradable. Lo que pude aprender de las diferentes culturas, de los hindús, incluso de los niños con los que tuvimos la oportunidad de estar y enseñar, y del trabajo en equipo dentro de nuestro equipo superó mis expectativas. Y en cuanto al proyecto, lo que dejamos en sí, creo que los resultados están todavía por ver. En unos meses estaría bien saber cómo van las cosas allí en School 125 en Nashik.